Construyendo Puentes: “Un espacio para conectar generaciones”

Para conocer cómo es la interacción al interior de las familias entre las distintas generaciones, en septiembre del 2023 el Centro de Opinión Pública de la Universidad del Valle de México realizó el estudio “Relaciones intergeneracionales: educación, crianza y convivencia familiar”.  

En casa, en el trabajo o en la escuela podemos convivir con diferentes generaciones desde baby boomers, generación X, millennials, centennials y alfa; cada una de ellas con su propia cosmovisión, parámetros educativos, culturales y de valores que hacen evidentes las diferencias intergeneracionales. Hoy educar a los hijos implica prácticas y costumbres distintas a las que recibieron e inculcaron nuestros padres y abuelos, como ejemplo, quienes tienen hijos consideran tener una actitud más comprensiva con sus hijos/as de la que ellos recibieron de sus padres.

Educación y crianza

Criar a los hijos e hijas es una tarea retadora donde influyen aspectos como estar presente, tiempo de calidad, disciplina, el trabajo, entre muchos otros elementos para determinar la calidad de la relación. De la relación entre padres y madres con sus hijos. Los padres de familia sienten que su hijo o hija hace cosas o toma actitudes para molestarlos, también indican que con frecuencia reciben comentarios hirientes de los hijos que los hacen sentir mal, y con frecuencia los hijos/as les gritan. Asimismo, los padres refieren que con frecuencia reciben amenazas de ser golpeados y con regularidad reciben insultos, empujones o golpes asiduamente. Este comportamiento de los hijos hacia padres puede distinguirse por edad, por ejemplo, padres y madres en edades más jóvenes (18 a 24 años) indican en mayor porcentaje y frecuencia que son insultados por sus hijos o hijas, escuchan amenazas de recibir un golpe.

Estos tiempos ya no son como antes

El estudio indica que los niños y las niñas no respetan a sus mayores. Esta idea está más presente entre los grupos de edad de 45 a 54 años y de 55 años o más. Hace unas décadas la obediencia incondicional de los menores hacia los adultos era una conducta irrebatible, pero hoy esta idea causa división pues un grupo está en contra de esta postura mientras el otro grupo lo consiente, mayor porcentaje de hombres que de mujeres da su respaldo. La crianza de los niños y las niñas, debe estar exenta de violencia y al amparo de los derechos de los niños y niñas. Esto conlleva discrepancias, pues puede ser visto como un marco protector para los y las menores, pero también atenuantes, tal división se percibe al considerar que con los derechos de los niños y las niñas ya no se les puede tocar o regañar ante un mal comportamiento.

Sana o fallida convivencia intergeneracional

Los miembros de la familia tendrán de forma natural distintas opiniones, y aunque es probable que ante un tema o discusión todos escuchen y expresen su opinión, un nivel alto de padres de familia piensa que los miembros con mayor autoridad terminan imponiéndose.

Al explorar el comportamiento intergeneracional se considera que con regularidad la primera generación (abuelos) toma en cuenta la opinión de los nietos, y se interesa por conocer sus puntos de vista, entre la primera generación (abuelos) y la tercera (nietos)  hay cambios culturales, sociales y educativos considerables, por lo que también se encuentran casos donde los abuelos hacen comentarios inapropiados sobre los gustos de los nietos (música, forma de vestir, sexualidad) e igualmente hacen comentarios inapropiados sobre el cuerpo de los nietos. 

Con respecto a la relación de los nietos con los abuelos los encuestados señalaron que la generación toma en cuenta las opiniones de los abuelos, y se interesan por conocer los puntos de vista de los mayores, y con poca frecuencia hace comentarios inapropiados sobre el proceso de envejecimiento de los abuelos.

En resumen, respecto a las actitudes de la primera generación (abuelos) hacia la segunda generación (hijos),  un alto porcentaje consideran que toman en cuenta las opiniones, pero notan comentarios inapropiados sobre la crianza de los hijos, y por otro lado hay comentarios inadecuados sobre las decisiones de vida que ha tomado la segunda generación.  Finalmente, entre la segunda y tercera generación se mantiene la tendencia donde más de la mitad piensa que hay interés por comprender sus puntos de vista y tomar en cuenta las opiniones.

¿Qué aportan las relaciones intergeneracionales sanas?

  • Aportan y comparten conocimientos, valores y experiencias.
  • Se evita la discriminación y los estereotipos asociados a la edad.
  • Mejora de la autoestima y del estado de ánimo, gracias al mantenimiento de relaciones sociales con otras generaciones.
  • Mantenimiento del aprendizaje. El aprendizaje continúa.
  •  Se amplían los conocimientos gracias al intercambio que se produce entre generaciones.

Los vínculos sanos entre generaciones son muy beneficiosas ya que abarcan las necesidades de educación, la transmisión de valores o de tradiciones culturales, y el aprendizaje de modelos positivos. Se comparten conocimientos, experiencias y capacidades. Y además, se incrementa la cooperación, la tolerancia, el desarrollo y la evolución de mayores, niños y jóvenes.

“Al reconocer el valor de cada generación y fomentar el diálogo y la colaboración, entre las distintas relaciones intergeneracionales podemos trabajar juntos para encarar o afrontar  los desafíos actuales y construir un futuro próspero y equitativo para todas las personas”.

 

Referencia: 

 

https://opinionpublica.uvm.mx/estudios/relaciones-intergeneracionales-educacion-crianza-y-convivencia-familiar/